Aunque se suele pensar que la circuncisión sólo se lleva a cabo por una razón cultural o religiosa, también supone grandes beneficios para la salud, ya que estudios realizados en los últimos años reducen la posibilidad de sufrir infecciones urinarias y cáncer de pene. Pero igual de importante es que se reduce el riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual, como la gonorrea, la sífilis y el VIH.
Los estudios realizados en los últimos años han mostrado que la circuncisión se asocia directamente con la disminución de la prevalencia de virus e infecciones que se transmiten a través de las relaciones sexuales en un 60 por ciento. Esto se debe a que las células de la zona debajo del prepucio tienen ciertas condiciones microambiéntales que hace a los hombres más vulnerables de contraer las enfermedades de transmisión sexual y enfermedades urológicas.
Organismos internacionales e instituciones, como la Organización Mundial de la Salud recomiendan la circuncisión voluntaria como una forma de prevenir las ETS en las regiones y poblaciones de alto riesgo. Si bien, no se trata de una solución definitiva y el uso de preservativos es la mejor forma de evitar estos padecimientos, la reducción que representa el someterse a este procedimiento es uno de los principales motivos por lo que se recomienda.
El someterse a este procedimiento de manera voluntaria como una protección parcial a las enfermedades de transmisión sexual es recomendada entre los hombres en los rangos de edad de 15 a 49 años, aunque se recomienda que se realice antes de que inicien su vida sexual, puesto que es cuando se está más expuestos a las infecciones. Para someterse a este procedimiento los invitamos a agendar una cita de evaluación vía telefónica, por correo electrónico en nuestro sitio web. Nuestros médicos urólogos tienen una amplia experiencia para el tratamiento de cualquier padecimiento urológico y procedimientos quirúrgicos.