El falo o pene fue para muchas civilizaciones un símbolo de poder y es por eso que incluso llego a ser venerado. Mucho de lo que concebimos como masculinidad en los hombres, está formado a partir de concepciones sociales, esto quiere decir que no es verdad del todo y que sólo está validado porque la tradición le ha otorgado ciertos criterios para decir que eso es o no masculino. A los hombres se les ha enseñado que su órgano reproductor es un motivo de orgullo, es por eso que cuando se sufre algún problema médico en el pene, suele ser una situación muy penosa y complicada. El cáncer, las enfermedades venéreas y la disfunción eréctil son los problemas más comunes por los que se acude a revisión con el urólogo.
El cáncer, a diferencia de la disfunción eréctil y las enfermedades venéreas, puede no presentar síntomas tan visibles sino hasta que se encuentre en una etapa avanzada de desarrollo. Es por eso que las autoexploraciones se deben realizar con regularidad y acudir al médico de inmediato en cuanto se presenten los primeros síntomas o se detecte alguna formación extraña o cambios en la estructura del aparato reproductor. Las enfermedades venéreas son tan variadas como sus síntomas, pero en casi todas las ocasiones salvo en enfermedades como el VIH o el papiloma humano, sus síntomas se muestran de forma que es inevitable acudir al médico. Las enfermedades como el VIH, por desgracia no muestran síntomas sino hasta que es muy complicado detener su avance.
México es un país muy rico en tradiciones y el uso de plantas para curar todo tipo de padecimientos ha estado presente desde mucho tiempo antes de la conquista española. Actualmente la medicina ha tomado algunos compuestos de la medicina tradicional y los han utilizado con muy buenos resultados, esto de alguna manera prueba que la medicina tradicional que está basada en la experiencia y no en la investigación, ha arrojado resultados benéficos y combinada con las nuevas técnicas y conocimientos médicos pueden ayudar a la pronta recuperación de un paciente. Pero es muy cierto que tanto la medicina de farmacia como la tradicional, si no se utilizan adecuadamente sus resultados lejos de ser benéficos suelen ser hasta perjudiciales para la salud.
Antes de tratar un padecimiento se debe tener la seguridad de qué es a lo que nos estamos enfrentando, de esta manera se puede escoger el tratamiento que sea más beneficioso. El mayor problema con la automedicación y el uso dela medicina tradicional es que muchas veces el padecimiento que se está tratando no existe o es sólo un síntoma o manifestación de otro tipo de enfermedad. Los síntomas de muchas enfermedades suelen ser muy similares y se pueden confundir con mucha facilidad, los médicos están capacitados para discernir entre los síntomas para dar un diagnóstico más certero, y los análisis clínicos son una gran herramienta para verificar la presencia de una enfermedad.
Tanto la medicina tradicional como la farmaceútica se utilizan con éxito en el tratamiento de enfermedades de transmisión sexual y del cáncer en el área genital masculina. La disfunción eréctil es un padecimiento que sólo se manifiesta en hombres y que consiste en la pérdida de erección y por lo tanto se traduce en una incapacidad para sostener relaciones sexuales. Es un problema muy común, se estima que cerca del 55% de los hombres mayores de 40 años en México presentan problemas para tener o mantener una erección. Este padecimiento es tratado tanto por la medicina tradicional como por la farmacéutica. La creencia de las capacidades afrodisiacas de algunos elementos de la naturaleza, es lo que propicia el consumo de animales incluso en peligro de extinción.
La disfunción eréctil se origina por diversas causas, se puede presentar hasta por problemas psicológicos, por lo que al acudir con un médico especialista, es más fácil determinar el origen del problema y así evitar el consumo de medicamentos o sustancias que en nada beneficiaran ni mejorarán el estado del paciente. En muchas ocasiones está ligada a otro tipo de enfermedades cardiovasculares y a la hipertensión, una de las causas más comunes es la baja irrigación de sangre a los cuerpos cavernosos del miembro viril, la diabetes, la hipertensión, el tabaquismo, sobrepeso, el alcoholismo y la drogadicción son algunas de las causas más frecuentes en los problemas vasculares que impiden la erección.
A veces el daño puede ser en niveles neurológicos y se evita que la orden llegue de manera correcta al pene, este tipo de problemas se origina por la presencia de diabetes, cáncer o por algún accidente o secuela quirúrgica. La rehabilitación en estos casos suele ser muy complicada, pero con un tratamiento adecuado puede revertirse, las hormonas también pueden afectar la erección. La erección depende de la existencia de testosterona que es la hormona masculina que se encarga del deseo sexual y de otorgar todos los rasgos atribuidos al sexo masculino. Algunos medicamentos y productos como los esteroides pueden hacer que el cuerpo produzca menos hormona de la necesaria, resultando en problemas para tener una erección.
Sin importar el origen del problema que se tenga, la visita a un especialista es vital para determinar el origen del problema y buscar una solución satisfactoria para el paciente. Los problemas sexuales suelen ser muy difíciles de sobrellevar sin la atención y el apoyo médico necesario. Si tú, tu pareja o algún familiar o amigo tienen un problema de disfunción eréctil, te invitamos a visitar nuestro blog para que obtengas más información de cómo combatir este padecimiento. O si tienes alguna duda, visítanos o llámanos. Recuerda que en UDU Unidad De Urología, tenemos una solución eficaz y en completa confidencialidad para cualquier problema de disfunción eréctil.