Una de las razones por las que se debe consultar a un urólogo Tijuana es el alargamiento de la próstata o hiperplasia prostática benigna. Se trata de una afección que afecta principalmente a hombres mayores y ocasiona problemas urinarios que van desde un aumento en la frecuencia de la orina hasta imposibilidad para orinar, infecciones y daños renales.

Signos y síntomas

Las gravedad de los síntomas de agrandamiento de próstata varía de una persona a otra, pero tienden a empeorar de manera gradual con el paso del tiempo. Entre los signos y síntomas más destacados se encuentra la necesidad de orinar frecuentemente, el aumento de la frecuencia de orina nocturna, dificultad para comenzar a orinar, flujo de orina débil, goteo después de orinar e imposibilidad de vaciar completamente la vejiga. También es posible que se presente infección de vías urinarias, imposibilidad de orinar y sangre en la orina.

El tamaño de la próstata no se relaciona necesariamente con la gravedad de los síntomas, pero es necesario consultar a médicos urólogos en Tijuana que se encarguen de realizar los exámenes y pruebas adecuados para su diagnóstico. Una vez que se ha confirmado el padecimiento se indica el tipo de tratamiento que pueda ofrecerles los mejores beneficios.

¿Qué la provoca?

Aunque los expertos no saben con certeza qué causa la hiperplasia prostática benigna, se han logrado establecer algunos factores de riesgo que incrementan las probabilidades de presentarla. Entre los principales se encuentran los siguientes:

Edad

Los hombres a partir de 50 años tienen un mayor riesgo de desarrollar alargamiento de próstata. Esto se encuentra relacionado con los cambios en los niveles hormonales y daño a los vasos sanguíneos que irrigan la próstata y las estructuras circundantes. Cuando las células de la próstata se ven privadas de suficiente sangre, algunos expertos especulan que esto desencadena el crecimiento no deseado de la glándula.

Historia familiar

Los hombres que tienen un pariente cercano que tienen alargamiento de próstata presentan un mayor riesgo de contraer la enfermedad, especialmente si sus familiares tenían síntomas lo suficientemente graves como para requerir tratamiento antes de los 60 años.

DHT excesivo

DHT es el acrónimo de dihidrotestosterona, una sustancia que es el resultado de una conversión de testosterona por una enzima llamada 5-alfa reductasa. La hiperplasia prostática benigna es una enfermedad dependiente de andrógenos, lo que significa que está influenciada por la hormona masculina testosterona.

La próstata no crece a menos que la testosterona, que es producida principalmente por los testículos, lo indique. Los niños a quienes se les extirpan los testículos antes de llegar a la pubertad nunca desarrollarán hiperplasia prostática benigna, y extirparlos después de la pubertad, pero antes de que se desarrolle alargamiento prostático, reduce drásticamente la posibilidad de padecer la enfermedad.

Estradiol elevado

Es natural que los hombres tengan algo de la hormona femenina estrógeno en forma de estradiol. El estradiol se produce como un subproducto de la conversión de testosterona, entre otros medios.

El equilibrio adecuado de estrógeno y testosterona en los hombres es importante para un deseo sexual saludable, para mejorar la función cerebral, proteger el corazón y fortalecer los huesos. Sin embargo, cuando los niveles de estradiol son demasiado altos y la proporción está desequilibrada, los hombres pueden experimentar fatiga, aumento de la grasa corporal, pérdida de la libido y agrandamiento de la próstata.

Un desequilibrio entre el estrógeno y la testosterona aumenta la actividad de DHT y, por lo tanto, estimula el crecimiento de las células de la próstata. Un urólogo Tijuana puede indicar e interpretar los estudios hormonales necesarios para comprobar que se encuentren dentro de los rangos considerados normales.

Sobrepeso/Obesidad

Tener sobrepeso, especialmente alrededor de la sección media, aumenta el riesgo de crecimiento excesivo de próstata. El vínculo entre la obesidad y la hiperplasia prostática benigna puede estar relacionado con los niveles reducidos de testosterona observados en los obesos. Además, una caída en la testosterona significa que hay un aumento en los niveles de estrógeno, lo que puede aumentar la actividad de DHT y, por lo tanto, el crecimiento de la próstata. La obesidad también afecta los niveles de insulina en la sangre, que es otro factor de riesgo para la hiperplasia prostática benigna.

Diabetes

Tener diabetes es uno de los factores de riesgo para el alargamiento de la próstata debido a niveles elevados de insulina. El vínculo diabetes-hiperplasia prostática benigna también puede estar relacionado con el daño que la diabetes causa en los vasos sanguíneos. Si los vasos que dan servicio a la próstata están dañados, el resultado puede ser una próstata agrandada.

Presión arterial alta

Aunque nadie está exactamente seguro de cómo la presión arterial alta puede desencadenar o empeorar la hiperplasia prostática benigna, los investigadores han encontrado un vínculo entre la hipertensión y el alargamiento.

Síndrome metabólico

el síndrome metabólico es un grupo de trastornos que aumentan el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares. Estos trastornos incluyen obesidad, presión arterial elevada, intolerancia a la glucosa o resistencia a la insulina, un estado proinflamatorio y un estado protrombótico. Los investigadores descubrieron que estos factores también son factores de riesgo para la hiperplasia prostática benigna.

Aterosclerosis

Si tienen arteriosclerosis, el endurecimiento y engrosamiento de las paredes arteriales causado por la acumulación de placa, pueden tener un mayor riesgo de alargamiento de glándula prostática.

Estilo de vida sedentario

La falta de ejercicio puede aumentar sus posibilidades de desarrollar hiperplasia prostática benigna porque el ejercicio ayuda a combatir la obesidad, la diabetes tipo 2, la resistencia a la insulina y otros factores de riesgo asociados.

Mala dieta

Por la relación que tiene la dieta con la producción hormonal, comer inadecuadamente puede incrementar los riesgos de padecer alargamiento de próstata y otros padecimientos relacionados, como obesidad, diabetes e hipertensión.

Sistema inmunitario debilitado

El ejercicio, la dieta deficiente, el estrés y el estilo de vida deficiente pueden comprometer y debilitar el sistema inmunitario y provocar enfermedades e inflamación y un mayor riesgo de enfermedad de la próstata.

¿Por qué consultar a un especialista?

Si se identifican los signos y síntomas del alargamiento de próstata y en especial si se reúnen factores de riesgo, conviene consultar a urólogos Tijuana. Los especialistas les indicarán el tratamiento más adecuado para reducir las probabilidades de que se presenten complicaciones. Entre las comunes está la retención urinaria, las infecciones urinarias, los cálculos en la vejiga, el daño en la vejiga y daño renal.

Si buscan los servicios de un urólogo Tijuana para el diagnóstico y tratamiento de alargamiento de próstata o hiperplasia prostática benigna, en UDU Unidad de Urología, somos una excelente opción. Para agendar una cita o solicitar información detallada llámenos al (664) 976 6433, con gusto los atenderemos.

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